Estados Unidos/Venezuela: El cantante, no la canción
Miguel Lozano
Caracas.- La reciente acusación del Departamento de Estado de Estados Unidos, a Venezuela de apartarse de las normas democráticas incrementó la tensión entre los dos gobiernos y limitó más las posibilidades de un diálogo que las dos partes dicen propiciar.
Pero también, al colocar otra vez a Venezuela al lado de su obsesión política de medio siglo ("Venezuela y Cuba siguen aisladas de la norma democrática en el hemisferio"), el gobierno de George W. Bush ratificó que el verdadero objetivo de Washington es el cantante, no la canción.
Washington crítica a Cuba por un sistema de partido único, sin elecciones.
Este modo de ver las cosas niega que en la isla son los vecinos y no el partido quienes proponen a los candidatos y los miembros de la Asamblea Nacional (encargada de elegir al Presidente del país) deben recibir obligatoriamente más del 50 por ciento de los votos.
Pero aún aceptando que sólo el multipartidismo es democrático, se hace cuesta arriba ver la causa de la hostilidad hacia los dos países en el interés estadounidense de defender la democracia .
En Venezuela existe multipartidismo y una oposición que en las pasadas elecciones presidenciales obtuvo más del 30 por ciento de los votos, un caudal político importante en cualquier nación.
Si no existen diputados de derecha en la Asamblea Nacional se debe a un error estratégico de la oposición, que prefirió no asistir a los comicios para intentar deslegitimar ese órgano antes de quedar en evidente minoría frente a la izquierda.
Sin embargo los sistemas de ambos estados (uno de partido único y el otro con multipartidismo) son calificados de antidemocráticos por el Departamento de Estado.
Por otro lado es difícil comprender que el llamado a "otros países vecinos de Venezuela" a respaldar su posición parte de la valoración de Washington sobre la situación Latinoamericana, porque ello implicaría desconocer la capacidad pragmática estadounidense.
En realidad los elementos apuntan a una repetición en el caso venezolano de los mecanismos utilizados durante casi medio siglo contra Cuba, incluyendo la planificación de más de 600 atentados contra el presidente Fidel Castro.
Prueba de ellos es la propuesta de extender a venezolanos residentes ilegalmente en Estados Unidos la llamada ley de "ajuste cubano", que estimuló las salidas ilegales de la isla, incluyendo el grueso de la potencial oposición de derecha.
Entre los promotores de este "ajuste venezolano" está Ileana Ros-Lehtinen, congresista republicana de origen cubano, quien este mismo año aseguró estaría feliz por la muerte del presidente cubano si alguien lo asesinara.
Una explicación de la repetición para Venezuela de un esquema de demostrada ineficacia durante casi 50 años sería atribuirle a Estados Unidos la falta de una política externa imaginativa y su incomprensión de la realidad continental.
Lo cierto es que no solo reproduce una política incapaz de sacar del escenario a un cantante incómodo (su canción es sólo el pretexto) sino que no tiene en cuenta que ahora se ha convertido en coro una voz alguna vez solitaria en medio del mar.
Fuente: Reporte/Prensa Latina
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Fabian Pacheco Casanova -